FELICIDADES, MUCHAS FELICIDADES HERMANO…

Marcan las horas, llegan los días, pasan los años, y otra vez llega un cumpleaños, otro año que se va otro año que viene, cada vez menos pelos, más grasa, más kilos, más alcohol, menos deporte y más familia. Es la estructura de hoy en día, el diario vivir; quisiera pasarlo con ustedes, anhelo reír, contar las anécdotas vividas, revivir aquellos años “mozos” como decían los abuelos, y brindar a corazón abierto y cariños compartidos de aquellos años idos; pero las circunstancias de la vida hacen que me sea imposible estar ahí compartiendo de la alegría diversificada que viven cada uno de ustedes.

Tito un hermano de años que se convirtió primero en un amigo incondicional, más tarde en un amigo íntimo, tiempo después en hermano y luego compadre; con mucho orgullo y nostalgia veo que los años no pasan en vano, y que dentro de sus proyectos de vida logra tener una gran familia, muchas amistades y un respeto del cual me hago asiduo y ferviente admirador como persona, desde aquí mis mejores deseos de felicidad, de superación y de éxitos en la vida. Que Dios ilumine tu hogar que ya te lo ha bendecido otorgándote una esposa maravillosa, amigable y digna de llevar las riendas de tu hogar, y un retoño que roba el corazón de todo aquel que lo vea, el mismo que tu me permitiste  llevar al altar para que reciba la bendición de Dios, el día en que también dabas el gran paso de tu vida junto a la mujer que envejecerá contigo, y estoy seguro que será la luz que ha de iluminar tus días por el cual estoy seguro, darás hasta la vida misma. Toda esa felicidad te lo has ganado por la calidad de persona que eres, por tu sencillez, tu honestidad y tu don ahora de padre de familia.

Hermano. Dios permitirá que volvamos a compartir más y mejores días, junto a las familias, amigos, compadres y allegados, mientras seguiremos bregando en vuestros propios caminos, tratando de vencer a la adversidad día con día, QUE SIEMPRE DIOS ILUMINE TU VIDA Y TU CAMINO… FELICIDADES HERMANO… MUCHAS FELICIDADES.